En un acto oficial realizado este martes, la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, firmó un acuerdo de préstamo con el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) por 300 millones de dólares, o unos 7.500 millones de lempiras. Este financiamiento permitirá iniciar la construcción de la Presa Multipropósito El Tablón, una obra muy esperada en el Valle de Sula.
Durante el acto, Castro enfatizó que este proyecto había estado olvidado durante décadas, a pesar de su importancia estratégica para el país. Además de mitigar las recurrentes inundaciones en la región, la Presa El Tablono también tiene como objetivo generar energía hidroeléctrica y garantizar el riego agrícola en una de las zonas más productivas de Honduras.
La construcción de esta infraestructura, que beneficiará a más de dos millones de personas, es el inicio de un esfuerzo integral del gobierno para superar los problemas históricos de vulnerabilidad climática y falta de desarrollo en el Valle de Sula.
Un proyecto retrasado que por fin toma forma
Según Eric Tejada, titular interino de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE), la primera fase de construcción de la represa tomará alrededor de cuatro años. La licitación está prevista para 2025. marzo, y la primera piedra se colocó en octubre del mismo año.
En su discurso, Castro recordó cómo a partir de 2022 se comprometió a renovar este importante proyecto. «Me dijeron que los estudios están listos, pero Honduras necesita hombres y mujeres comprometidos con el bienestar de las generaciones futuras», dijo el presidente, enfatizando la importancia de mejorar un trabajo que proteja a los residentes y promueva el desarrollo sostenible.
El principal objetivo de El Tablón es reducir en un 43% el impacto de las inundaciones en el Valle de Sula. Además, la presa contribuirá a la producción de energía limpia e impulsará la agricultura local mediante el riego, un beneficio fundamental para una región que ha enfrentado desafíos climáticos y económicos durante décadas.
Dejando planes sin terminar
En su discurso, Castro recordó que este proyecto no es nuevo. Sus orígenes se remontan al gobierno del expresidente Manuel Zelaya, quien impulsó iniciativas de conservación forestal y financió estudios preliminares de las represas Llanitas y Jicatuyo. Pero la falta de aplicación de la ley ha dejado a miles de hondureños vulnerables a desastres como huracanes y fuertes lluvias.
En su discurso, la presidenta cuestionó: «¿Cuántas vidas se habrían salvado y cuánta inversión se habría protegido si estas obras se hubieran construido a tiempo?» Con estas palabras reafirmó su compromiso con la implementación de los proyectos que el país necesita para garantizar la seguridad y el desarrollo de la población.
Si bien El Tablón es una prioridad, los proyectos de las presas Llanitas y Jicatuyo aún están bajo investigación. Según Tejada, estos planes estarán listos para ser implementados por la próxima administración, por lo que quedará claro que la solución de los problemas climáticos e hídricos del país requiere de la continuación de los esfuerzos del gobierno.
Apoyo del sector privado
El anuncio de la construcción de la presa El Tablón fue bien recibido por representantes del sector privado, quienes reconocieron los esfuerzos del gobierno por solucionar los problemas históricos del país. Karim Qubain, presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Cortes (CCIC), celebró la decisión y dijo: “Para aquellos que dicen que Xiomara no está cumpliendo, aquí hay un ejemplo.
Por su parte, el empresario Jorge Faraj enfatizó el papel del liderazgo de las mujeres en la solución de problemas que administraciones anteriores ignoraron. «Mi madre siempre dice que tiene que venir una mujer a arreglar esto», comentó, refiriéndose a la determinación del presidente Castro de impulsar proyectos estratégicos.
Impacto regional de la presa El Tablón
La construcción de esta presa no sólo beneficiará al Valle de Sula, sino que también tendrá un impacto significativo en la vida de una cuarta parte de la población hondureña. La capacidad de El Tablón para reducir las inundaciones en los ríos de la región, especialmente el río Camalote, será una ayuda fundamental para miles de familias que han sufrido años de lluvias devastadoras.
Si bien el proyecto soluciona parcialmente los problemas de inundaciones, el río Ulúa aún es un desafío pendiente. La ENEE indicó que se investigarán más las soluciones para este río y que su implementación dependerá de futuras administraciones.
Una reflexión final
La activación del proyecto El Tablón representa un paso importante para Honduras hacia un futuro más seguro y sostenible. La firma del contrato con el BCIE es el inicio de obras que no sólo reducirán el impacto de eventos climáticos extremos, sino que también promoverán el desarrollo económico y social en una de las regiones más importantes del país.
A pesar de los desafíos que aún quedan, el gobierno de Xiomara Castro ha enviado un mensaje claro: Honduras no puede seguir retrasando sus principales proyectos de desarrollo. Al construir El Tablón, el país pretende no sólo proteger a su población de futuras tragedias, sino también sentar las bases de un modelo de crecimiento más resiliente para las generaciones futuras.